Cuernavaca suele caracterizarse por su atmósfera internacional y de apertura a los pensamientos y corrientes innovadoras debido a lo cual en diversas ocasiones se ha convertido en sede de acontecimientos protagónicos y como ejemplo en esta ocasión comentaremos el tema del psicoanálisis. En el año de 1957 cuando corría la primera semana del mes de agosto, se reunieron en Cuernavaca personajes de prestigio y reconocimiento mundial como es el caso del doctor Erick Fromm y el maestro D. T. Susuki, quienes con otro grupo de personalidades efectuaron el primer Seminario Sobre Budismo Zen y Psicoanálisis, contrario a lo que podría prejuiciarse, se llegó a descubrir además de conclusiones conciliatorias las sorprendentes afinidades entre ambos pensamientos logrando así a difundir los puntos de convergencia entre Oriente y Occidente.
El seminario mencionado tuvo como sede a la universidad del estado (U. A. E. M.), siendo de tal trascendencia e importancia lo tratado que inclusive el Fondo de Cultura Económica editó un volumen donde quedaron constatadas las ponencias y disertaciones tanto del maestro Susuki como del doctor Fromm, cabe destacar que en el año de 1957 todavía estaba lejano el acercamiento por parte de occidente y de nuestro país al pensamiento búdico que ejercería una gran atracción en los años sesentas y en base a estos hechos es que podemos afirmar el carácter pionero de la ciudad de Cuernavaca y la relevancia de este primer seminario sobre budismo Zen y psicoanálisis.
Otro acontecimiento de relevancia en el ámbito de psicoanálisis y que tuvo resonancia internacional fue el protagonizado por el sacerdote Gregorio Lemercier quien en el año de 1950 fundó el monasterio de Santa María Ahuacatitlán.
El padre Lemercier debido a los problemas se salud que tuvo se sometió al tratamiento de terapias sicoanalíticas, descubriendo que por ese medio podía adquirirse un pensamiento mas realista y objetivo, llegando a la conclusión de que una buena parte de los postulantes que llegaban a su monasteriocon con el fin de tomar los hábitos, carecían del espíritu apostólico y de firmeza en la fe, pero, ingresaban almonasterio con la finalidad de evadir las responsabilidades que implica el afrontar los retos de integrarse a un contexto social. Apoyado en los razonamientos anteriores el padre Lemercier creó el centro Psicoanalítico Emaús cuya finalidad fue que los aspirantes con intenciones deingresar al monasterio se sometieran voluntariamente al psicoanálisis, aunque esta ayuda terapéutica se ofrecía a cualquier persona que deseara resolver sus problemas existenciales.
El seminario mencionado tuvo como sede a la universidad del estado (U. A. E. M.), siendo de tal trascendencia e importancia lo tratado que inclusive el Fondo de Cultura Económica editó un volumen donde quedaron constatadas las ponencias y disertaciones tanto del maestro Susuki como del doctor Fromm, cabe destacar que en el año de 1957 todavía estaba lejano el acercamiento por parte de occidente y de nuestro país al pensamiento búdico que ejercería una gran atracción en los años sesentas y en base a estos hechos es que podemos afirmar el carácter pionero de la ciudad de Cuernavaca y la relevancia de este primer seminario sobre budismo Zen y psicoanálisis.
Otro acontecimiento de relevancia en el ámbito de psicoanálisis y que tuvo resonancia internacional fue el protagonizado por el sacerdote Gregorio Lemercier quien en el año de 1950 fundó el monasterio de Santa María Ahuacatitlán.El padre Lemercier debido a los problemas se salud que tuvo se sometió al tratamiento de terapias sicoanalíticas, descubriendo que por ese medio podía adquirirse un pensamiento mas realista y objetivo, llegando a la conclusión de que una buena parte de los postulantes que llegaban a su monasteriocon con el fin de tomar los hábitos, carecían del espíritu apostólico y de firmeza en la fe, pero, ingresaban almonasterio con la finalidad de evadir las responsabilidades que implica el afrontar los retos de integrarse a un contexto social. Apoyado en los razonamientos anteriores el padre Lemercier creó el centro Psicoanalítico Emaús cuya finalidad fue que los aspirantes con intenciones deingresar al monasterio se sometieran voluntariamente al psicoanálisis, aunque esta ayuda terapéutica se ofrecía a cualquier persona que deseara resolver sus problemas existenciales.
Sin embargo El Vaticano, al enterarse de estas prácticas consideró necesario profundizar mas en el asunto por lo cual envió a Cuernavaca un visitador apostólico con la tarea de compenetrarse mas a fondo en esta innovación y así normar un criterio para determinar la postura del Vaticano. El padre Lemercier apoyó su decisión en base a la regla establecida por san Benito, fundador de la orden, y dicha regla exigía la búsqueda verdadera de Dios, sin embargo el argumento no fue lo suficientemente satisfactorio para el Vaticano por lo que Paulo VI ordenó la disolución de la orden obteniendo como resultado que los miembros de la comunidad benedictina que estaban de acuerdo con Lemercier permanecieran con el y siguieran funcionando, pero, como una comunidad laica y el resto, que se apegó a las exigencias del Vaticano establecieran una nueva comunidad benedictina pero en el poblado de Ahuatepec.
POR ENRIQUE MARTINEZ G.
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